Una rigidez en el cuello se caracteriza por dolor, dolor e incomodidad al intentar girar la cabeza en cualquier dirección.
Una causa común de rigidez en el cuello es un músculo tenso en la parte posterior o lateral del cuello que conecta la columna cervical del cuello con el hombro.
Las distensiones del cuello generalmente ocurren cuando se mantiene una postura sin apoyo durante mucho tiempo, como mientras se encorva y mira una computadora, mira continuamente hacia abajo a un teléfono móvil, acuna un teléfono entre el cuello y el hombro, o duerme en una posición incómoda.
Cuando un músculo del cuello está tenso, las fibras musculares y los tendones pueden estirarse más allá de sus límites normales o desgarrarse, causando dolor, sensibilidad y dificultad para mover el cuello.
Si un músculo grande, como el trapecio, está tenso, el dolor del cuello puede irradiarse hacia el hombro y sobre el omóplato y la parte superior de la espalda.
A medida que el cuerpo trata de estabilizar la lesión, también se pueden experimentar espasmos musculares dolorosos. Una rigidez en el cuello debido a una lesión por distensión muscular puede limitar significativamente el movimiento en el cuello y puede volver a ocurrir si no se aborda la causa. Esta condición generalmente mejora con el cuidado personal en unos pocos días.