Aunque es poco frecuente, es posible que los signos y síntomas de la ciática sean una señal de alarma de una serie de enfermedades graves que pueden requerir una intervención médica o quirúrgica inmediata.
Entender y diferenciar entre los síntomas benignos de la ciática y una emergencia médica puede ayudar a prevenir la discapacidad y las consecuencias potencialmente mortales mediante la búsqueda de atención médica.
In This Article:
- Situaciones en las que el dolor de la ciática es una emergencia médica
- Afecciones de la médula espinal con síntomas de ciática
- Tumores medulares y síntomas de ciática
- Afecciones vasculares que causan síntomas de ciática
- Causas y Síntomas de la Ciática Video
Afecciones médicas graves que pueden causar síntomas similares a los de la ciática
Estas son algunas de las afecciones con signos y síntomas similares a los de la ciática que requieren tratamiento médico o quirúrgico inmediato:
- Compresión o infección de la médula espinal. La compresión de la médula espinal lumbar o la cola de caballo (nervios que descienden de la médula espinal) puede causar dolor en las piernas y dolor de espalda. Los abscesos de la médula espinal, los quistes articulares facetarios o las infecciones también pueden causar dolor de espalda y piernas, especialmente con el movimiento.
- Tumores. Los tumores de la vaina epidural lumbar (cubierta externa), el hueso, los tejidos blandos, la vaina del nervio ciático o la glándula prostática pueden causar dolor de espalda y de piernas. Los tumores metastásicos (comúnmente de cáncer de próstata y cáncer de pulmón) también pueden provocar síntomas similares a los de la estenosis espinal.
- Problemas vasculares. Los aneurismas de los vasos sanguíneos, el síndrome compartimental y las infecciones de los vasos sanguíneos pueden causar dolor en las piernas y la espalda similar al de la ciática. Estas afecciones pueden provocar la pérdida de riego sanguíneo en la pierna afectada (isquemia) y causar síntomas graves.
- Problemas renales. El dolor de riñón debido a quistes, cálculos o infecciones puede irradiarse a la espalda y las piernas.
Cualquier tipo de compresión nerviosa requiere atención médica inmediata. Si se produce debilidad o entumecimiento progresivo de las piernas, el nervio puede estar dañado, lo que puede provocar la pérdida de la función de las piernas. Si el nervio está comprimido y el dolor y los síntomas son graves, puede ser necesaria una intervención quirúrgica.
Síntomas y signos de alerta roja de dolor de espalda y dolor en las piernas
Se recomienda acudir al médico cuando, además del dolor ciático, se presenten uno o más de los siguientes síntomas de alerta:
- Dolor intenso en la espalda, la pierna, el abdomen o el costado del cuerpo que se puede sentir:
- En reposo
- Por la noche
- Al acostarse, caminar, flexionar la cadera o presionar la parte baja de la espalda
- Hinchazón en cualquier parte de la parte baja de la espalda, el muslo o la pierna
- Una sensación pulsante en la pierna o el muslo
- Debilidad intensa o pérdida de sensibilidad en la ingle, las piernas o la zona genital
- Fiebre, escalofríos o sudores nocturnos
- Una sensación de picazón en las zonas adoloridas de la pierna que provoca la necesidad de rascarse (prurito)
- Una sensación de frío en los pies o dedos de los pies
- Cambio de color de la piel de las piernas o los pies (normalmente azul en casos de insuficiencia vascular)
- Infección de la pierna que no se cura
- Pérdida parcial o total del control de la vejiga o los intestinos, dificultad para orinar o defecar, o bien presencia de sangre en la orina o las heces
- Disfunción sexual
- Pérdida de apetito o de peso
- Cambios en el aspecto de la piel, el cabello y la masa muscular de las extremidades (manos o pies)
Si el dolor ciático se desarrolla como resultado de una lesión directa en la espalda, se vuelve grave o intolerable o no se alivia con reposo, técnicas de autocuidado o ejercicio, debe ser evaluado por un profesional médico.
Varias afecciones que causan ciática o tienen síntomas similares pueden causar pérdida de función en las piernas o en los órganos lumbares. Algunas pueden convertirse en afecciones potencialmente mortales. Los antecedentes de cáncer, diabetes, hipertensión u otras afecciones sistémicas pueden aumentar el riesgo de desarrollar estos problemas.